¿QUÉ ES EL TRASTORNO BIPOLAR?
El Trastorno
Bipolar es una posición psíquica, esto es, una posición en el lenguaje que se
puede cambiar. En psicoanálisis no recetamos medicamentos para tratar este tipo
de trastorno, porque sabemos que una posición psíquica se modifica con psicoanálisis,
un tratamiento psíquico.
Partiendo de esa
base, de que en psicoanálisis el paciente bipolar no es un paciente trastornado
ni nada se ha roto en su aparato psíquico. La bipolaridad de este trastorno
refleja una alternancia de estados de ánimo extremos, pasando de una fase de
depresión o melancólica del estado de ánimo a una fase de manía, o alegría
excesiva.
En la fase de depresión
o melancólica, el paciente pierde todo el interés por el mundo real, siempre y
cuando no esté en relación con algo que siente que ha perdido (una persona
querida, un objeto amado, un ideal). Se encuentra en un estado profundamente
doloroso, con apatía, abulia, insomnio o sueño excesivo, etc. Pero sobre todo
lo que caracteriza estas fases son los autorreproches que el paciente se hace a
sí mismo públicamente, fantasías de empequecimiento y autohumillación. Se
reprocha ser una persona que no merece ser estimada, a la vez que se muestra
irritable. En su máxima gravedad una fase de melancolía puede llevar al
paciente al suicidio.
En la fase de
manía, el paciente se libera de su propio yo y se siente liberado de una
condena. Da muestras de una enérgica actividad, emprende proyectos, se siente
invulnerable. Dominado por un sentimiento de triunfo y de satisfacción. No
perturbado por crítica alguna. Se siente libre de toda inhibición y al abrigo
de todo reproche o remordimiento. Puede llevarle a emprender caminos
arriesgados.
En el Trastorno
bipolar las fases de depresión y manía se alternan. También se lo ha llamado
trastorno maníaco-depresivo o psicosis maníaco-depresiva, porque hay un
componente de forclusión del nombre del padre, como en la psicosis, y una
identificación narcisista que lleva en la depresión a introyectar el objeto
amado hasta tal punto de identificarse con él y castigarlo hasta matarlo
(castigarse hasta matarse) y en la manía a la confusión de los límites del yo y
el superyó.
La explicación de
este trastorno sólo puede hayarse en motivos inconscientes de la personalidad o
estructura psíquica. El aparato psíquico es complejo, en el sentido de que está
conformado por diferentes procesos, inconsciente, preconsciente y conciente e
instancias Yo, Ello y Superyo, que mantienen relaciones intersistémicas e
intrasistémicas.
Los mecanismos
psíquicos del aparato son los mismos en una persona sana que en una persona
enferma o en una persona cuando está sana y cuando se enferma. La diferencia
entre la salud y la enfermedad no es una diferencia de cualidad sino de
cantidad.
Aplicando esto a
la posición psíquica que estamos estudiando “trastorno bipolar” en la fase de
depresión el yo se identifica con el objeto perdido, y el superyó castiga al yo
por haberlo abandonado, a la vez que su narcisismo le lleva a sentir un gran
dolor por el abandono. En la fase de manía, el Yo se libera de la custodia y
castigos del superyó, durante un tiempo. De tal forma que el juego de fuerzas
es cíclico y se repite la alternancia de posiciones.
Si usted padece
algunos de estos síntomas, no dude en llamarnos, somos expertos en el
tratamiento del Trastorno Bipolar con Psicoanálisis, sin medicamentos.
Virginia
Valdominos
Psicoanalista de
Grupo Cero
Tfno. 91 125 77 47
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